Este loft parisino transformado está lleno de luz y almacenamiento inteligente

Por Eva Morell

Fotografía por BCDF Studio

Para los propietarios de este loft parisino, su diseño y distribución inusuales, heredados de su vida anterior como taller de confección, fue un sueño hecho realidad. Sin embargo, después de un año viviendo en él, se dieron cuenta de que se necesitaban algunos ajustes para hacerlo más funcional y mejor adaptado a su estilo de vida.

La diseñadora y arquitecta Isabelle Heilmann, fundadora del estudio Épicène, fue la encargada de la renovación del espacio. Su objetivo era satisfacer las necesidades de los propietarios mediante la creación de un diseño más racional, y adecuado para el trabajo remoto, manteniendo la esencia única del espacio. El resultado final es un loft bohemio lleno de luz.

La puerta verde, la lámpara y las plantas complementan los tonos neutros circundantes.

Las diferentes estancias del apartamento se han reconfigurado jugando con sus formas y volúmenes inusuales. Las diversas áreas están separadas y conectadas por paredes de vidrio que permiten que la luz pase por todas partes. La oficina y el dormitorio están separados del comedor con medias paredes, mientras que los techos altos del espacio se conservan en todo el apartamento. El diseño crea un cubo incrustado dentro de la sala de estar. La ventana interior del dormitorio aporta luz y se suma a su encanto distintivo.

Una escalera conduce al espacio elevado.

Isabelle mantuvo la pared divisoria de vidrio de estilo industrial original como un guiño a la historia del taller. Convirtió la cocina en una habitación que se adapta a las necesidades de los propietarios mientras asiente con la cabeza al pasado de la unidad. Para los armarios montados a lo largo de las ventanas, la combinación de abedul con el color blanco que predomina en el apartamento da como resultado una sensación cálida y deliberadamente sobria.

Tanto el arquitecto como los clientes querían mantener la antigua oficina del sastre, que ahora sirve como habitación de invitados. Los diseños de los baños sorprenden, llenos de color que contrastan con el omnipresente blanco del apartamento. Detrás de una puerta verde, llaman especialmente la atención los azulejos rosas y el suelo de gres porcelánico del tocador.

Las estanterías en el espacio de la oficina añaden profundidad al apartamento en su conjunto.

En un estilo típicamente francés, y especialmente parisino, hay una atención meticulosa a cada detalle. La paleta de colores blancos del piso y las paredes hace que los elementos de diseño de interiores se destaquen, incluidas piezas vintage como la mesa de comedor y las lámparas y objetos de diseño más contemporáneos como la clásica lámpara Snoopy de Achile Castigiloni.

Isabelle mantuvo el tabique de vidrio original, que ahora separa la cocina del resto de las habitaciones.

Los volúmenes inusuales del antiguo taller se utilizaron para crear nuevos espacios de almacenamiento y dormitorio.

Se utilizaron materiales naturales en todo el apartamento, como el abedul en la cocina. Para las encimeras se utilizó un Corian blanco desgastado.

La sala juega con los diferentes niveles del apartamento, creando un espacio social divertido y práctico. Una pared de cristal lo separa del dormitorio.

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La combinación de objetos de diseño vintage y contemporáneo, como la lámpara Snoopy en verde, le da un toque personal al espacio.

La oficina está a otra altura, lo que ayuda a definirlo como un espacio separado, aunque está abierto al resto del apartamento.

La esencia del loft parisino, como antiguo taller de confección, se conservó cuando se reformó.

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El resultado final de la renovación de Isabelle es el apartamento de ensueño de los propietarios.

Los acentos coloridos se introducen a través de las puertas del apartamento, pintadas en tonos vibrantes.

El dormitorio está separado del resto del apartamento por una ventana interior, lo que proporciona luz y privacidad.

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Se construyó un cabecero de mampostería a modo de mesita de noche y lugar para los libros, cuadros y objetos de los propietarios.

Desde el dormitorio, el gran vestidor abierto es una composición geométrica y colorista con su puerta pintada de amarillo, la colcha verde y el elemento cúbico de los armarios.

El baño le da un toque de color al espacio con materiales que brindan una atractiva variedad de texturas diferentes.

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En el baño principal, el juego de volúmenes y cubos del altillo se traslada en forma de lavabo alicatado de cantos redondeados y techo coloreado.

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